LA HUMEDAD
Aunque no la veamos, el agua está en casi todas partes. Nuestro cuerpo se compone de agua en el 65% de su peso. Dado que plantas y animales contienen gran cantidad de agua, no puede soprendernos que los productos extraídos de ellos conserven la humedad. Si la madera, el marfil o el hueso se secan, se contraen y pueden agrietarse o deformarse. Los productos orgánicos laminados como el papel, el pergamino, el cuero y los tejidos naturales pierden flexibilidad y sus fibras se rompen.
Por el contrario, en condiciones de excesiva humedad no es fácil que se produzcan esas alteraciones, pero, en cambio, es la situación idónea para el desarrollo de hongos y moho.
La absorción de humedad hincha los objetos y viceversa. Al cambiar de tamaño, cambian también de forma. Muchas piezas de museo están hechas de diferentes materiales mezclados. Raramente responden a los cambios de humedad del mismo modo, por lo que suelen producirse roturas. También se pueden romper los objetos compuestos de piezasd el mismo material, ya sea por el pegamento, ya sea porque el material aumenta de manera diferente en las distintas direcciones. La madera, el marfil y el hueso aumentan más en las vetas uque a lo largo del resto. En la categoría de los más sensibles se encuentran las pinturas sobre lienzo, los muebles barnizados, los instrumentos musicales y los objetos de madera tropical.
Por ello, los cambios de humedad son un desastre protencial en los museos (...). También es importante tener en cuenta, de entrada, que el control de la humedad es mucho más importante que el de la temperatura (1)
Por el contrario, en condiciones de excesiva humedad no es fácil que se produzcan esas alteraciones, pero, en cambio, es la situación idónea para el desarrollo de hongos y moho.
La absorción de humedad hincha los objetos y viceversa. Al cambiar de tamaño, cambian también de forma. Muchas piezas de museo están hechas de diferentes materiales mezclados. Raramente responden a los cambios de humedad del mismo modo, por lo que suelen producirse roturas. También se pueden romper los objetos compuestos de piezasd el mismo material, ya sea por el pegamento, ya sea porque el material aumenta de manera diferente en las distintas direcciones. La madera, el marfil y el hueso aumentan más en las vetas uque a lo largo del resto. En la categoría de los más sensibles se encuentran las pinturas sobre lienzo, los muebles barnizados, los instrumentos musicales y los objetos de madera tropical.
Por ello, los cambios de humedad son un desastre protencial en los museos (...). También es importante tener en cuenta, de entrada, que el control de la humedad es mucho más importante que el de la temperatura (1)
(2) Ejemplo de un indicador electrónico de humedad y temperatura
Siguiendo el REAL DECRETO 1826/2009 de 27 de Noviembre, por el cual se crea una norma de obligado cumplimiento por la que debe indicarse en los lugares públicos los datos de la temperatura y humedad. Deberá instalarse en Locales Administrativos, museos, cines, teatros, estadios, auditorios, tiendas, supermercados, centros comerciales, salas de conferencias, piscinas y poliderportivos, bares, restaurantes y cafeterias, estaciones, aeropuertos, etc...
(1) Texto leído en: THOMSON, G. (1998). El museo y su entorno. Madrid : Ediciones Akal p.71
(2) Texto e imagen en enlace original : http://www.eicom.es/
(1) Texto leído en: THOMSON, G. (1998). El museo y su entorno. Madrid : Ediciones Akal p.71
(2) Texto e imagen en enlace original : http://www.eicom.es/
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