viernes, 14 de enero de 2011

Reflexiones sobre los usuarios del museo y estrategias de captación a través de las nuevas tecnologías

REFLEXIONES SOBRE LOS USUARIOS DEL MUSEO Y ESTRATEGIAS DE CAPTACIÓN A TRAVÉS DE LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS

Ana Benítez Ramos [elmuseologo@gmail.com]

Licenciada en Historia del arte


Palabras clave: Museos, Cultura, Usuarios, Nuevas tecnologías, Público, Sociedad, Comunicación, Museo Thyssen-Bornemisza, Museo del Guggenheim Bilbao y Museo Caja Granada Memoria de Andalucía

Resumen: Con esta reflexión se plantea la importancia de las necesidades culturales de cada individuo y su relación directa como usuario dentro del museo, analizando los diferentes modelos de visitante. Por último, como consecuencia a esas necesidades se plantea un modelo de captación de usuarios a través de la aplicación directa de las nuevas tecnologías.



Las necesidades culturales de los usuarios

La situación actual de los museos con respecto a la sociedad es bastante difícil de definir en criterios generales, ya que como dice Ileana Gisela en su artículo (1) no hay un uso universal, sino que depende de las necesidades de cada sociedad y cultura, y a su vez, cada usuario hace un uso diferente de las necesidades comerciales o de consumo. Aunque la autora se refiere al uso de las tecnologías específicamente, se puede hacer extensible a las necesidades y prioridades de la sociedad en sí.


Son muchas las circunstancias (controlables o no controlables) que hacen que los modos de vida de un usuario requieran una necesidades totalmente diferentes a otro, independientemente de cuestiones de carácter general; geográficas, étnica, culturales, etc. De manera específica, las necesidades culturales de un usuario particular pueden no ser compatibles a la familia, vecino, compañero de trabajo, amigo, etc… simplemente por circunstancias no controlables tales como; género, rama laboral, aficiones personales, valores éticos y morales, etc… o por el contrario, circunstancias controlables, tales como; los medios de comunicación, política, religión, educación familiar etc…


Es una realidad que hoy en día, encontramos una sociedad inmersa en las nuevas tecnologías, con mayor o menor grado (dejando el análisis de la brecha cultural (2)existente a un lado, no por ser menos importante, sino porque en sí misma, siendo un tema tan significativo, debería tratarse en otro ensayo, no quedando como mera referencia), lo que hace, como consecuencia, que los museos deban tener en cuenta éstas necesidades y usos para atraer a su público y no caer en soluciones ya obsoletas y de desinterés general. Al igual que las nuevas tecnologías están en constante evolución, lo mismo debe ocurrir con los museos en relación a la sociedad que los demanda; no se pueden conformar con cubrir las necesidades generales, ambas deben aspirar a mejorarse, evaluarse, renovarse y en esencia, seguir sorprendiendo al usuario que los utiliza.


Algunos modelos de público: usuarios del museo


Después de hacer esta aclaración de la necesidad constante de renovación con el apoyo de las nuevas tecnologías – museos para uso del usuario, tendremos en cuenta algunos modelos de esos “demandantes activos de cultura” que quieren tener contacto con los museos por iniciativa propia y los “usuarios pasivos” que simplemente se encuentra con la posibilidad de tomar contacto con el museo que el demandante activo ha buscado a priori. A mi entender, existen éstos dos modelos de público relacionados con el museo que analizaremos con más detalle en esta reflexión, y es prioridad del museo estudiar la forma de fomentar y atraer a ambos usuarios con un programa efectivo de captación y difusión.


Dentro de éstos usuarios; Activo (Interesado) o pasivo (Desinteresado) podemos dividirlos en subgrupos en relación a la demanda o programa que el museo debe ofrecerles para atraerles indistintamente.




Entre los demandantes activos encontramos a profesionales culturales interesados en visitar estas instituciones para su formación, práctica y constante renovación. También están los usuarios de formación e inquietud humanística que, independientemente de su situación personal, sacan tiempo por hobbie para visitar los diferentes centros. Por último entre estos demandantes, añado los económicamente acomodados, por ser los que, indiferentemente de su interés e inquietud cultural real, tienen acceso fácil a la misma por su situación privilegiada, estos usuarios reciben invitaciones a exposiciones, actos y celebraciones que, de manera gratuita les supone una formación intrínseca cultural independientemente del interés personal. Muchas veces, éste último grupo puede conformar una inquietud por una formación cultural indirecta que acaba por atraerles o directamente por haber cultivado este interés desde un principio (combinándose con el segundo tipo de usuario de inquietud humanística).


Entre los usuarios pasivos que no asisten regularmente al museo tenemos a los acompañantes, usuarios que no deciden ir al museo pero que acompañan a alguien del grupo de demandantes activos (este grupo tiene grandes posibilidades de convertirse en Activo). Los usuarios que no tiene formación relacionada con la cultura o no tienen inquietud artística son usuarios desinteresados en el museo y por tanto, la institución debe estudiar de manera eficaz como atraer a este público por otros medios. Finalmente el grupo de los económicamente desfavorecidos son pasivos, ya que al no ser accesible para ellos, no se puede tener en cuenta sus necesidades e intereses a través de los estudios estadísticos de público. El acceso al museo y en general a la cultura para todos, desgraciadamente sigue siendo una materia pendiente para muchos, por lo que este grupo difícilmente podrá saltar al lugar de demandantes activos.


Una vez que los museos tienen en cuenta los usuarios que entran / pueden o quieren entrar en un museo, deberá hacer un estudio de cómo mantener esos demandantes activos , que por otro lado, son mucho más “exigentes”, y como acercar el museo a esos usuarios pasivos, que no pueden visitar estos centros o no están interesados. El museo como centro de difusión cultural debe buscar un equilibrio para integrar ambos grupos, con iniciativas que resulten enriquecedoras para ambos, sin interponer los fines comerciales a los sociales.


Estrategias de captación de usuarios a través de las nuevas tecnologías


En un intento de interpretar éstas necesidades de los usuarios por parte de los museos, se han llevado diferentes iniciativas bastante refrescantes y renovadoras. De hecho, una de ellas es el uso de las nuevas tecnologías. Los Museos cada vez con mayor frecuencia, añaden a sus páginas web visitas virtuales o la colección que el museo posee, para poder visitarlo a través de la red, esta iniciativa supone un valor positivo. Aunque siempre será mejor la visita in situ, supone un acercamiento al museo de manera rápida, barata y eficaz.


Otra iniciativa es la adaptación tipológica de los edificios (de antigua y nueva planta) a las necesidades actuales. JARQUE, Fietta Y ZABALBEASCOA, Anatxu mencionan en su artículo (3) la labor de Piano en Venecia, y cómo lleva a cabo la transformación de un antiguo almacén portuario redefiniendo el espacio con una máquina de lienzos rotatorios por la sala, dejando libres las paredes y facilitando al visitante la apreciación de éstos cuadros sin tener que moverse. Según el artículo, cito textualmente: “Sin ruido, y sin moverse, un visitante puede ver hasta veinte lienzos en una hora”. Éste adelanto responde a una necesidad de los usuarios de museos, ya que la masificación y aglomeración de éstos centros, dificulta cada vez más su visita, quedando los edificios limitados en su espacio.


En la actualidad encontramos el uso de audioguias, PDAs, reconstrucciones digitales de lugares que actualmente no se conservan, e incluso información obtenida a través de los móviles… un sinfín de material tecnológico para el usuario y que cada vez se irá ampliando, siempre buscando la comodidad del público que visita los museos.


Destacamos aquí por su relevancia las iniciativas llevadas a cabo del uso de las TICs por parte de dos museos: el museo del Guggenheim Bilbao o el Museo Thyssen-Bornemisza a través del programa Educathyssen. Ambos museos, usan las nuevas tecnologías para ofrecer a los usuarios todo tipo de actividades virtuales (juegos, visitas virtuales, videos multimedia, etc…) de manera que el usuario puede contar con este material de manera instantánea y gratuita.


Por último, mencionar otra iniciativa museológica directamente vinculada al uso de las nuevas tecnologías para responder a esta demanda social. El Museo Caja Granada Memoria de Andalucía, mezcla las funciones tradicionales del museo con respuestas tecnológicas innovadoras tales como la visita interactivas con el uso de tecnología sin tener necesidad de tener una exposición permanente y física, con la posibilidad de realizar muchas y variadas exposiciones temporales. Los mediadores culturales del centro se apoyan de un interfaz para presentar la visita a través de pantallas explicativas que fomentan tratamientos educativos para el centro, a la vez de llamar la atención de los más jóvenes por el uso de una tecnología, desconocida aun por muchos de nosotros, lo que hace que haya conseguido una de sus metas, atraer a nuevos usuarios en busca de lo desconcertante y desconocido, e incluso profesionales de otra rama que no es cultural, tales como ingenieros de informática o telecomunicaciones atraídos al museo en un interés personal por el interfaz usado en ésta institución.


Como conclusión, en esa adaptación de las nuevas tecnologías a los museos teniendo en cuenta sus usuarios, no debemos perder la perspectiva original de la función que tiene la institución. La doctora BELLIDO GANT, M.L expone en su libro (4) como las nuevas tecnologías deben ser un componente auxiliar y nunca un sustituto dentro del museo , pero no debemos negarnos a la evidencia de que la sociedad actual depende cada vez más de éste componente auxiliar como parte integradora de su vida.



NOTAS

(1) SAN JUAN RIVERA, Ileana Gisela, Cultura Digital y reconfiguración del habitus tecnológico. Reflexiones teóricas y filosóficas. Número 64. México. Octubre, 2009.

(2) Ídem

(3) JARQUE, F. ZABALBEASCOA, A. Templos del arte y el ocio. Periódico digital El País. Julio, 2009.

(4) BELLIDO GANT, María Luisa: Arte, museos y nuevas tecnologías. Gijón: Trea, 2001



Para citar este texto:

BENÍTEZ RAMOS, Ana (2011): “Reflexiones sobre los usuarios del museo y estrategias de captación a través de las nuevas tecnologías”. Disponible en: http://elmuseologo.blogspot.com/2011/01/reflexiones-sobre-los-usuarios-del.html [Citado: día/mes/año]

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4 comentarios:

  1. Hola! Mi nombre es Laura Benadiba y me gusta mucho la página. la mía es Memoria, Historia Oral y Educación y Asociación Otras Memorias. Soy Historiadora y trabajo con la Historia Oral hace 16 años. Tengo escritos varios libros y doy cursos en mi país (Argentina) y en otros. La semana que viene me voy a España y justamente una de las ciudades donde daré un curso es en Bilbao. La gente que asiste a mis cursos son de historia, archiveros, docentes de todos los niveles, investigadores y mucha gente de Museos. Les dejo un link para que vean algunas de las cosas que hago y me gustaría seguir en contacto.
    http://campus.almagro.ort.edu.ar/cienciassociales/historiaoral
    Un beso
    Laura
    Para ver los contendidos, que son más de 100 hay que pinchar en cada título de sección.

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  2. Hola Laura!
    Gracias por presentarte, es un placer contar con las experiencias de otros. Es muy interesante el estudio de la Historia Oral (hace falta) y acabo de visitar tu página y ver los muchos enlaces y secciones que teneis, contando con talleres y proyectos diferentes. ¡Felicidades!
    Espero que puedas contarnos (cuando se pueda ya sea a través del blog o por email) alguna de tus experiencias vinculadas a los museos.
    Seguimos en contacto
    Saludos
    Ana

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  3. un artículo muy interesante, y si que es cierto que nos guste o no vivimos la revolución tecnológica y la sociedad se tiene que adaptar, tambien los museos cómo no,y sobre todo porque es un buen recurso para atraer al público y tambien cómo no utilizar las nuevas tecnologías para cumplir su función didáctica y educativa,además si tenemos en cuenta que el mayor porcentaje de visitantes al museo son generalmente escolares, debemos acercarnos a ellos a través de su " lenguaje" que no es otro mal que nos pese que las tecnologías, manejan ordenadores, pda, maquinitas varias con una agilidad asombrosa, que ya me gustaría a mi,ya,de esta manera no sólo se sienten atraidos y cambian el concepto de museo por un espacio que les atrae,tanto los juegos interactivos, como diferentes recursos multimedia además facilitan la asimilación de los conceptos y desarrollan facultades nada despreciables,de esta manera tambien estaremos formando un nuevo tipo de usuario activo que en definitiva es de lo que se trata....

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  4. Gracias por expresar tu opinión, Marta. Efectivamente, hay que ver las nuevas tecnologías como una material auxiliar/apoyo y no sustitutiva de la colección. Como mencionas, hay que atraer a todo tipo de público y ese usuario que se ha gestado con los años, la "generación de la máquina" pide de estos recursos en su actividad cotidiana.

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